Lo que nadie quiere saber

La Biblioteca de la Sede de San Sebastián de la ELP nos hace llegar como cada mes la reseña de un libro relacionado con el psicoanálisis. En esta ocasión Koro Benavente, socia de la Sede, nos hace llegar su lectura sobre el libro «Lo que nadie quiere saber» de Lierni Irizar. Esperamos os interese!

LO QUE NADIE QUIERE SABER

Lierni Irizar

En esta reseña quisiera comentar el último libro publicado por Lierni Irizar. El título ya me resultó bastante sugerente, Lo que nadie quiere saber. Pues si nadie quiere saber… Pero aquí está el trabajo del psicoanalista, metiéndose por las entrañas de esos quereres tan complejos y sorprendentes. Lierni nos habla de un ser humano agujereado, ¿y de dónde surge este agujero? Pues siguiendo las enseñanzas de Lacan, diremos que el agujero, o la falta, o el ser en falta, provienen de nuestra constitución como seres de lenguaje. Estar por tanto, dentro del discurso exige pagar un precio, aunque no nos guste reconocerlo o no seamos capaces, que a veces, no se trata de querer sino de poder. Lierni se sirve de poemas, sueños, películas, música… para acercarnos a ese enigma que nos configura. Acercarse al agujero, que es el abismo, puede ser insoportable, y algunos responden intentando taparlo, como en el caso de Fausta y su patata. Otros son tragados por él y no pueden vivir, superados por las circunstancias.

Desde el psicoanálisis nos animan primero, a reconocer la existencia del mismo y después a aprender a vivir rodeando sus bordes, e intentando que la angustia sea productiva. El agujero es lo que provoca el deseo y el deseo es lo que nos hace actuar. La autora aprovecha las singularidades del autismo para explorar este humano agujereado. Los autistas se encuentran fuera del discurso, pero no, fuera del lenguaje y los testimonios que nos acerca Lierni son muy interesantes para aprender otras formas de estar en el lenguaje y la soledad y angustia de no poder entrar en el discurso. En mi trabajo me he encontrado con chicos autistas que eran incapaces de hablar con los demás en la clase, pero que a través del móvil, mandaban mensajes de audio correctamente pronunciados. Veremos pues, con Lierni los recursos de algunos autistas para poder acceder al Otro.

Me ha parecido muy interesante la crítica que aparece al Renacimiento, pues el humano que se persigue no existe. Kant será quien establezca las características del humano moderno, con su finitud y los límites de la razón humana, que harán posible la aparición del humano de la ciencia. Hoy en día el humano, como dice Lierni, se ha convertido en un objeto de mercado, el consumidor consumido. Esto me recuerda a una frase que oí hace poco y que me pareció muy gráfica; si en esas aplicaciones que te ofrecen los móviles y las redes sociales, no tienes que pagar, es que tú eres el producto. Por eso Lierni nos invita a pensar un «Nuevo Humano». Desde luego no es tarea fácil, y para ello hace un repaso de los conceptos lacanianos en los que podemos encontrarnos: El Sujeto, el Deseo, el Goce, el Síntoma y lo Real. El más complejo de estos conceptos creo que es lo Real, pues se refiere a aquello que se escapa al sentido y a la representación. Lierni nos llevará de la mano del Dios Dionisio de la Antigüedad Griega, el dios loco que representa el caos, lo sin ley, lo irracional, la otredad.

Me parece que Lierni consigue arrastrar al lector en este apartado que ya por sí solo merece todo el libro. Y con esa misma sensibilidad, nos cuenta la experiencia con Lauris, la chica con discapacidad que se empeña en estar en el mundo. No me gusta compadecer a los discapacitados, pues trabajo con ellos y eso no aporta nada, pero el encuentro entre Lierni y Lauris, es un golpe de suerte que Lauris se merecía. El trabajo que ha hecho con ella ha influido en toda la familia y en los que estamos alrededor. Lauris es un Enigma con mayúscula y aunque no le gusta mucho mirar a la cara, cuando lo hace, es una experiencia inenarrable. Creo que no hace falta nada más para animaros a la lectura de este libro, que nos hará plantearnos muchas preguntas, que responderá a muchas otras y que está tan bien escrito que parece una voz, un canto.

Donostia, febrero de 2021

Koro Benavente, socia de la Sede de San Sebastián de la ELP

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